La filosofía de IMBA y nuestra forma de hacer las cosas ha sido siempre la de realizar la defensa de los intereses de los ciclistas de montaña de forma respetuosa y siempre mediante el diálogo con las Administraciones y los gestores de los espacios protegidos por los que discurren los caminos y senderos que son nuestro espacio de actividades recreativas y deportivas.

El respeto, hacia la naturaleza y hacia los otros usuarios de estas infraestructuras, el sentido común y la seguridad son nuestros principios fundamentales y así queremos que siga siendo en el futuro. Al mismo tiempo que respetamos a los demás usuarios y al medio en el que nos desenvolvemos , exigimos correspondencia por parte de todos aquellos a los que hemos mencionado, a fin de que la convivencia se produzca de la mejor manera posible.

Sin embargo, estamos viendo que cada día ese respeto es menor y nos encontramos con prohibiciones arbitrarias para circular en bicicleta, sin que exista información suficiente, argumento jurídico o informe de impacto que acredite la naturaleza de la prohibición. 

Parece, más bien, que se da credibilidad a comentarios u opiniones sesgadas y en muchos casos falsas para crear una especie de "estado de opinión" en el que se apoyen estas limitaciones.

Nos encontramos con que algunos miembros de ciertos colectivos están haciendo crecer la bola de nieve para tomarse la justicia por su mano y recriminarnos como si fuéramos delincuentes o incluso criminales, cuando es lo contrario y estamos sufriendo la colocación de todo tipo de "trampas", tanto jurídicas como físicas, para evitar que podamos practicar una actividad sana y un deporte saludable.

Cierto es que los conflictos tradicionalmente se han venido produciendo en zonas con mucha población, en las que nos vemos compartiendo los caminos y senderos con otros usuarios, pero en la actualidad se están produciendo en zonas en las que esta variable no existe.

Por ello, llamamos a la responsabilidad de todos los implicados en estas actividades. Por un lado, nosotros mismos, haciendo hincapié en circular con precaución y seguridad y, por otro, hacia todos aquellos que se quieren tomar la revancha y ponen el peligro la vida o la integridad física de los ciclistas de montaña.